Hoy es viernes y nieva en Washougal, WA que es donde vivo. Desde hace una semana el pronóstico del tiempo anunciaba esta nevada, que se va a prolongar todo el fin de semana y yo estaba y sigo muy entusiasmada. La nieve para mi es algo distinto, algo que experimenté por primera vez a mis 50 y cada vez que nieva me convierto en una nena y hago cosas de nena pero bajo mi responsabilidad… y eso está bueno 🙂

Hoy temprano, escribía para mi, que no me gustaría pensarme en unos años, diciendo, por qué no aproveché un día de sol, una conversación con amigos, una cena a luz de las velas en el patio de mi casa o como hoy: la nieve. Sigo pensando montones de veces y estoy segura que te pasa algo similar en que debería haber disfrutado más diferentes cosas, cuando Demonia (es el nombre que le puse a mi mente :)) se pone en marcha aparece el DEBERIA HABER que tanto daño hace y que es inmodificable porque es pasado. Pero tenemos la oportunidad del aquí y ahora para hacer algo distinto y disfrutar de las pequeñas y grandes cosas de la vida 😉

En qué momento dejamos de ser niños? En qué momento dejamos de estar presentes y empezamos a decir: mañana tengo que hacer esto y el mes que viene lo otro…. yo creo que todo empezó en la escuela con las tareas y se fue reforzando con los años, viviendo muchas veces en piloto automático, sin educación emocional.
Me encantan los niños y niñas en esa edad que todo los sorprende, que salen a caminar y paran doscientas veces para mirar una flor, o una hormiga o cualquier cosa que se cruzó por su camino y viviendo el PRESENTE con absoluta naturalidad. Desde hace un tiempo estoy tratando de hacer lo mismo, parar cuando hay algo que me gusta, salir de la cama para sacar una foto cuando los colores del amanecer te dejan con la boca abierta o como hoy: salir en pijamas y descalza a sentir la nieve y el frío que hace afuera. Salir y reirme de mi misma 🙂

Mirar y estar concientes de donde estamos te puede llevar apenas unos minutos y realmente esos minutos valen la pena, porque cuando te acordas de lo que hiciste volves a sonreir, volves por un ratito todos los días a ser un niño.
Que tengas un lindo fin de semana disfrutando un poco más de lo que tenes alrededor.
